domingo, 29 de mayo de 2016

La suerte está echada.

En el ciclismo, como en la vida, no existen los milagros. De lo que hayamos hecho este último año va a depender  como nos irá el próximo sábado en nuestra Vuelta al Término de Yecla en BTT. El cóctel de sufrimiento y goce que degustaremos a lo largo de los 153 km de la ruta resultará gratificante siempre que consigamos tomarla a tragos sin que se nos atragante.
Doy fe de que los once de la foto en el alto del Capirutxo han hecho bien los deberes y terminarán con garantías. Nos vemos, como siempre, al final en la estación de autobuses, para celebrar el gran día que nos espera.

1 comentario :

Diego dijo...

"Alea iacta est", la suerte está echada para las doce Liebres que completamos el duro recorrido del sábado (los once de la foto más el fotógrafo y cronista Juan Ramón), y para el resto de ciclistas que vayan a participar.
No sé si habremos hecho los deberes bien o no, pero de lo estoy convencido es que los doce acabaremos nuestra quinta Vuelta al Término con cansancio, pero con dignidad.